Es necesaria la revitalización de
procesos de la insurgencia de las diversidades y las diferencias sociales,
cuyas respuestas políticas han impedido los intentos de homogenización y de
construcción de una cultura planetaria que intenta desestructurar,
instrumentalizar y despolitizar, el sentido político insurgente de esa
diversidad y diferencia.
La interculturalidad se muestra
como una respuesta política que emerge desde pueblos que han vivido la
colonialidad del poder, del saber y del ser.
Existe un equívoco de considerar
la multiculturalidad, o la pluriculturalidad como si fuesen sinónimo de
interculturalidad.
Pluriculturalidad
En el interior de nuestros
espacios geográficos, sociales, políticos, coexisten múltiples culturas con
identidades propias y diferenciadas.
Sugiere una pluralidad histórica, en la que se
expresa un sentido relacional entre las diversas culturas. Allí operan
cuestiones de poder y asimetrías sociales que hacen conflictiva la
coexistencia.
A pesar de la coexistencia existe
hegemonía de la cultura blanco mestiza.
De la ideología del mestizaje, a
la ideología de la multiculturalidad
Los conquistadores construyeron
un proceso de diferenciación colonial sustentado en la idea de raza;
Se crea un sistema de
clasificación de estratificación y subalternización que tienen al blanco como
cúspide de la pirámide social y a negros e indios, como los otros.
La ideología del mestizaje se
sustenta en la del blanqueamiento de la sociedad, el proyecto nacional
hegemónico ha sido buscar la civilización de los negros e indios.
La vía civilizatoria
salvacionista del indio y del negro está en el mestizaje.
El mestizaje como ideología
facilita la colonización del imaginario, la colonialidad hace que Europa y
ahora EE.UU, se conviertan en aspiración.
La insurgencia de las
nacionalidades indias y de los pueblos negros, ha puesto en crisis la validez
de la ideología homogeneizadora del mestizaje. Obliga a que el poder sustituya
la ideología del mestizaje, por el ideologema de la multiculturalidad.
La ideología subterránea de la multiculturalidad
La multiculturalidad, si bien
reconoce la existencia de diversidad de culturas, las muestra dispersas y
segregadas.
La tolerancia liberal del multiculturalismo
reconoce la otredad, la diversidad y la diferencia, siempre y cuando estas
permanezcan fieles al ser de la nación y no impugnen el orden dominante y sean
útiles al neoliberalismo y a proceso de globalización del mercado.
El mercado necesita de la
diversidad y la diferencia, para convertirla en segmentos diferenciados de
consumidores.
La interculturalidad es un proceso político por construir
La interculturalidad es una
realidad que aún no existe, es una utopía posible.
Interculturalidad significa entre
culturas relaciones, interacciones; no es simple coexistencia de culturas, sino
la convivencia de estas.
Implica encuentros dialogales y
una continua relación de alteridad entre sujetos concretos.
La interculturalidad será posible
cuando diferentes culturas se encuentren en equidad de condiciones para el
intercambio de recursos materiales y simbólicos de su propia cultura, cuando
puedan reconocer y ser reconocidas como distintas.
La interculturalidad es un horizonte para la decolonización de la vida,
del poder, del saber y del ser
La interculturalidad vista como
tarea política significa hacer visible cómo opera la matriz colonial-imperial
de poder. La colonialidad continua operando en tres niveles: la colonialidad
del poder (control de la economía, política, cultura), colonialidad del saber
(epistémico, filosófico, científico), y la colonialidad del ser (sexualidad,
subjetitividades, cuerpos).
La interculturalidad lucha contra
toda forma de colonialidad.
La decolonialidad insurge en
perspectiva de la liberación, la decolonizacion del poder, del saber, pero
sobre todo del ser, para poder construir un horizonte otro, diferente de
existencia.
La interculturalidad solo será posible con la
insurgencia contra un poder que se sustenta en la homogeneización, la negación,
el irrespeto, la desigualdad, la marginación y la dominación de las sociedades
diferentes.
La interculturalidad y el otro
La noción de pensamiento otro
plantea la necesidad no de otro pensamiento, sino de un pensamiento otro, un
pensamiento que radicalice la diferencia en perspectiva insurgentes de
liberación, para la lucha por la decolonización.
La interculturalidad: una construcción más allá de lo étnico
La interculturalidad rebaza lo
étnico, implica la interrelación, la interacción dialógica de diversos y
diferentes actores societales, representados por etnias, clases géneros,
regiones, comunidades, generaciones, etcétera, con distintas representaciones y
universos simbólicos.
La dialéctica de la
construcción de una sociedad intercultural
En la interculturalidad se expresa una dialéctica entre la
pertenecía y la diferenciación, entre la identidad y la alteridad, entre la mismidad
y la otredad en condiciones de equidad y respeto.
Es necesario ver a la diversidad y la diferencia, como uno
de los derechos más importantes de los individuos, de los pueblos, de la
humanidad; nuestros derechos no terminan donde comienzan los de los otros, ni
los de estos donde empiezan los nuestros, sino que al estar hermanados en la
alteridad, al saber que habitamos en los otros y que los otros habitan en
nosotros hace posible que podamos hermanarnos en la lucha por su defensa.
No hay comentarios:
Publicar un comentario